Hasta el 16 de junio, en la segunda planta del museo, 10 esculturas del Museo de Escultura de Valladolid se exponen con cuadros relacionados con las mismas.
La presentación de la exposición tuvo lugar el pasado lunes y asistieron Guillermo Solana, direc tor artístico del museo, María Bolaños, directora del Museo Nacional de Escultura de Valladolid y Mar Borobia, directora del proyecto y jefa del área de Pintura Antigua del Museo Thyssen.
Guillermo Solana comentó que el Museo Thyssen no tiene esculturas propias en su colección. Las que hay son préstamos de la familia Thyssen. Sin embargo para entender la pintura, sobre todo la expuesta en la segunda planta que va desde el Renacimiento hasta el siglo XVII, es esencial contemplar el desarrollo de la escultura.
El Renacimiento italiano se caracteriza por la constante comparación entre la pintura y la escultura. Asi, por ejemplo, algunos artistas se decantaron por la pintura, como Leonardo da Vinci, mientras que otros prefirieron la escultura, como Miguel Angel. Más allá del juego retórico esta ‘competición’ fue origen de muchos de los conceptos críticos y teóricos de la Historia del Arte. La noción de la línea frente al color o el concepto de lo visual y lo táctil.
La exposición actual nos permite entender aspectos formales del desarrollo de las dos artes y también ayuda a comprender conceptos más personales. Así tenemos una escultura anónima del diablo del siglo XVIII al lado de un cuadro del demonio de Rubens, o un busto de Carlos V de joven frente a un retrato de Lucas Cranach el Vuejo de 1533.
María Bolaños dijo que normalmente las esculturas ocupan un lugar secundario en los museos de pintura, en los pasillos o corredores. Esta exposción es un ejemplo de la necesidad que tienen los museos de compartir e impulsar proyectos conjuntos. El espectador debe disfrutar del diálogo que se impone entre las esculturas y las pinturas y dejarse llevar por los sentimientos o pensamientos que le sugieran.
La exposición se puede visitar hasta el 16 de junio. El horario es los lunes de 12:00 a 16:00 (entrada gratuita gracias al patrocinio de Mastercard) y de martes a domingo de 10:00 a 19:00.
Fotografías: Rafael Castañeda