Mayo, 2013
Aunque hayan pasado ya muchos años, esta entrevista a Ian Gibson no ha perdido su interés.
Un irlandés en España
Ian Gibson se considera ante todo un hombre de letras, letras románicas en concreto, más que historiador. Y esa característica le hizo venir a España en búsqueda de sus personajes.
Es fundamentalmente biógrafo del siglo XX, sobre todo de los años 1930. Sus personajes preferidos se encuentran entre los grandes literatos españoles de esa época, aunque también ha estudiado a fondo a Dalí y a Buñuel. ‘Me fascina la época de los años 30. Entré en el mundo de Lorca a los 18 años y no he salido nunca. Es el mundo de todo el entorno de la República. Tan rico y tan denso a nivel político, musical, dramático… y luego se vino abajo con la dictadura. Ha sido una aventura fantástica y sigue siéndolo.’
Ian Gibson vino a España durante la época de la Transición (obtuvo la nacionalidad española en 1984) pensando en que quería vivir a tope esta etapa, cosa que hizo. Se preveía que iba a haber una alternancia en el poder de los dos partidos más relevantes, pero sobre todo hacía falta desterrar el odio y avanzar y crear la gran España. Cuando llegó acababa de publicar su primer libro sobre el asesinato de Lorca y estaba preparando su biografía.
Los historiadores británicos y España
A la pregunta de por qué los historiadores británicos que han escrito sobre España son de los más conocidos, Ian Gibson nos responde con humor que ‘Quizás son los más exhibicionistas, porque los franceses tienen hispanistas de primera fila fortísimos. Publican muchísimo, pero no son tan conocidos. Hugh Thomas ha escrito sobre todo sobre la Guerra Civil. La falta de posibilidades de publicar por aquel entonces en España hizo que hubiera una gran demanda en Inglaterra y Estados Unidos. Ian Gibson es el único que vino y se quedó en España. Vive la realidad española desde el año 1978, día a día. ‘Los demás vienen y se van, esa es la diferencia. No es lo mismo ser hispanista a distancia que trabajar aquí. Esto es un hecho.’
El siglo XIX
El siglo XIX es un siglo muy complicado a nivel político. Si además tenemos en cuenta que los partidos de hoy en día no se ponen de acuerdo acerca de la enseñanza, no es de extrañar que muchos no sepan quien fue Prim o Pi y Margal.
Es dificil conocer esta época a fondo, sobre todo teniendo en cuenta que muchos eran grandes personajes. Además geográficamente España es un país complicado. Es el segundo país más elevado después de Suiza con unas comunicaciones difíciles. Había reinos de Taifas por todos los lados. Es un territorio muy difícil. Y no olvidemos el clima. Organizar a este país no fue fácil. Si lo comparamos con Inglaterra vemos que ahí hubo más continuidad, fue un imperio potentísimo, con medios, una cultura asentada de siglos y, sobre todo, sin invasiones o guerras civiles. Hay una cultura secular profunda. En cada pueblo hay una sociedad de historia local, con su archivero, su cementerio, su biblioteca donde van a hacer investigaciones… Esto ha creado un caldo de cultivo que en España no ha podido haber por sus propias circunstancias.
‘La berlina de Prim’
Como escritor profesional, de vez en cuando se tiene la necesidad de hacer algo diferente. Ian Gibson se sentía extrañado que nadie hablase de la I República. Se hablaba de la II República, pero de la primera poco se contaba. Poco a poco fue elaborando la idea de hacer una novela sobre una época y un tema concreto del siglo XIX, ya de por sí tan complicado. Y así surgió la idea de esta novela en la que nos relata los tiempos de la I República y, más en concreto, del sexenio progresista. La semilla fue germinando y dió con un argumento que surgió del cementerio británico de Málaga donde se encuentra enterrado un irlandés que murió fusilado al lado de Torrijos, Robert Boyd. No sólo murió allí sino que antes había pagado la expedición desde Londres. Era un liberal que odiaba a Fernando VII y había conocido a Torrijos en Londres poniendo su fortuna a su disposición. La posibilidad de escribir sobre este personaje no entraba en los planes de Ian Gibson puesto que habría supuesto una investigación demasiado larga y no disponía del tiempo requerido. Poco a poco fue surgiendo el general Prim, el sexenio y la revolución del 68 y vio la forma de vincular ambos acontecimientos. Así nació el personaje ficticio de un hijo ilegítimo de Boyd con una española. Este hijo serviría de nexo de unión entre ambas épocas. Conocería a Prim en Londres, al igual que su padre había conocido a Torrijos. Y así nació ‘La berlina de Prim’.
‘La España que yo anhelo es la España de Machado Nuñez’
El sumario del magnicidio
Evidentemente la redacción de la novela requirió una investigación bastante profunda. Entre otros documentos Ian Gibson estudió el sumario del asesinato de Prim. Vió los libros del sumario físicamente en los Juzgados en la Plaza de Castilla y los estudió en el Archivo Histórico Nacional, donde se encuentra un microfilm completo. Pasó varios meses dedicado al estudio de estos documentos. Se lamenta Ian Gibson del estado en que están. No sólo faltan documentos, sino que parcialmente son illegibles, posiblemente por la forma inapropiada en que se han almacenado. Hay así grandes lagunas. También consultó otro documento que se encuentra en el Tribunal Supremo, el apuntamiento o resumen del sumario. Tampoco en este caso las condiciones fueron las mejores: una mesa destartalada, imposibilidad de hacer fotocopias, una luz que a veces no funcionaba…. y se trata de un documento que para los historiadores probablemente pudiera ser de gran utilidad, ya que donde en el original faltan partes, es posible que aquí se encuentren. Se trata de un documento que habría que restaurar primero, ya que hay páginas que no pueden separarse y se encuentra bastante deteriorado. Habría que digitalizarlo. A estas alturas debería ser un documento abierto a los investigadores. Hay que tener en cuenta que el asesinato de Prim cambió el rumbo de este país. Es una puerta que queda abierta a posteriores investigaciones de profesionales de la historia.
La libertad al escribir una novela
‘La berlina de Prim‘ obtuvo el premio Fernando de Lara de 2012. El que el bicentenario del general Prim sea en el año 2014 es una casualidad. Ian Gibson llevaba ya años con la idea de la novela y, de hecho, no era consciente del próximo bicentenario.
‘ La novela me ha permitido llegar a un público al que no llego con mis libros de investigación. Además he podido elaborar diálogos, cosa que no se puede hacer cuando se escribe una biografía sobre un personaje real. No puedes inventar diálogos.’ Es la ventaja del novelista. Ian Gibson confiesa que este hecho le dio gran libertad. Evidentemente eran diálogos inventados aunque siempre tratando de reflejar conversaciones posibles.
Uno de los personajes que más le atrajeron de aquella época y que se encuentra también en ‘La berlina de Prim‘ es el de Antonio Machado Nuñez. Ian Gibson conoció a este personaje cuando escribía la biografía de Antonio Machado. Se trata de su abuelo sin el que los hermanos Machado habrían sido diferentes. Les permitió vivir un ambiente liberal y progresista. ‘Cuando pongo en contacto al protagonista de mi novela con el personaje de Machado Nuñez ambos hablan sobre la situación de España, a dónde va, cuál será su futuro. Esto me ha dado una libertad que antes no tenía y que me ha fascinado. Claro que he leído todo lo que publicó Machado Nuñez y así aprovecho sus escritos para darle vida a través de los diálogos.’
La españa de Prim y la España de hoy
En esta novela el autor ha ido relatando lo que ha captado de la realidad de España durante años. Entre líneas la novela tiene mucho que ver con la España de hoy. Era una manera de poder hablar de lo que está pasando ahora. ‘La España que yo anhelo es la España de Machado Nuñez. No me gusta esta España de ahora, llena de conflictividad. La gran España culta, progresista, amplia y abierta todavía no ha nacido. Si el libro tiene alguna fuerza será hacer pensar al lector que todavía hay mucho que hacer.’
‘España es un país muy complejo. Mi maestro, Gerald Brenan, en su libro ‘El laberinto español‘ habla de esta complejidad y ahora estamos en una situación parecida. Se creía que con Europa el país iba a avanzar, que iba a haber un pacto entre los dos grandes partidos de cara a los problemas fundamentales. Cuando ves que no es así, sientes una gran desazón y tristeza.’
Personajes alrededor de Prim
El general Prim era un hombre muy envidiado. Era valiente, siempre al frente de sus hombres y tenía carisma. Era muy europeo y tenía don de gentes. Era el hombre más poderoso del país.
Entre los personajes que rodearon a Prim, Ian Gibson destaca al duque de Montpensier. Era el hijo del rey de Francia, llevaba veinte años viviendo en Sevilla, era multimillonario y quería ser rey de España. Ian Gibson no va a escribir la biografía de Montpensier, pero piensa que es uno de los personajes clave de su época y que deberíamos contar con un estudio profundo del personaje. Era un hombre muy pragmático, moderno, quizás habría sido un buen rey, quién sabe. Otro personaje muy interesante es el general Serrano. Era regente, lo que significaba ser casi jefe de estado. Cuando llegó Amadeo de Saboya, Serrano se vió relegado a un segundo lugar. Que tuviera que ver con el asesinato ya es otra cosa.
Otro personaje llamativo es Paul y Angulo que se merece un nuevo estudio. La mayoría no sabe ni siquiera quién fue. Ian Gibson no cree en su implicación en el asesinato.
‘España necesita más biografías sobre sus personajes relevantes’
‘En cada página de mi libro hay pistas para futuras investigaciones.’ Para Ian Gibson es la hora de que venga gente jóven y tome el relevo. ‘Se ha creado una amnesia histórica en este país.’ Una forma de conocer la propia historia son las biografías. Por poner un ejemplo, de Lord Byron debe haber más de 25. Siempre hay alguien que descubre algún aspecto nuevo del biografiado.
Ahora Ian Gibson acaba de entregar la primera mitad de su biografía sobre Buñuel. Posiblemente publique a partir de ahora más novelas o ensayos. Una biografía lleva como minimo cinco años de preparación. No obstante nos quedará la segunda parte de la biografía sobre Buñuel que promete ser apasionante. Igual de apasionante que poder charlar con una persona tan interesante y cercana como este irlandés-español que vive España con los cinco sentidos.
Fotografías: Rafael Castañeda Fotografía