Miquel Casas es psicólogo y con su empresa ‘Behavioural Healthcare Consulting‘ ha ayudado a muchas personas en estos últimos años de pandemia.
MVyC: ¿Cuándo decidiste crear ‘Behavioural Healthcare Consulting‘?
MC: Junto a mi socio creamos ‘Behavioural Healthcare Consulting‘ en el año 1997. Por aquel entonces yo dirigía la Unidad de Stress del Instituto Dexeus en Barcelona. Allí recibíamos a managers, directivos y también nos mandaban algunos empleados porque era de las pocas Unidades de Stress que había en los hospitales españoles. Fue una idea del hospital de unos años antes y yo estuve al frente de esta Unidad seis años. De ahí surgió la idea de ampliar el espectro de llamémosles ‘clientes’. Pensábamos que era poca gente la que venía y que en realidad debía ser la psicología clínica la que se tenía que acercar a las empresas. Y de esta idea nació ‘Behavioural Healthcare Consulting´.
MVyC: Desde el principio teniáis ya unos temas concretos para tratar o ¿fueron surgiendo según necesidad?
MC: Mira, piensa que en realidad saliendo de la Unidad del hospital lo primero que hicimos fue montar un centro psicológico en Barcelona y desde allí empezamos a ir a las empresas a hacer formaciones relacionadas con la salud y el bienestar. Eso incluía programas de ‘Gestión del Stress’, ‘El sueño reparador’, temas como ‘Dejar de fumar’, aprender ‘Técnicas de Relajación’, etc. Todo este tipo de formaciones era nuestro sello identificativo. Además todos los formadores eran psicólogos. Al cabo de un tiempo montamos un centro de psicología en Madrid con la misma idea. Con el tiempo ves las necesidades de las empresas a nivel de liderazgo, de comunicación, etc. Además empezamos con el ‘Coaching’ del que en el año 1997 no hablaba nadie. Y las empresas empezaron a demandar la figura de un psicólogo dentro de la compañía. Ese fue un momento clave para nosotros porque eramos psicólogos y ya estábamos colaborando con las empresas. Eso nos abrió muchas puertas. Además para estos temas concretos que acabo de mencionar buscamos otro perfil de psicólogos, psicólogos del mundo de la empresa, de Recursos Humanos. Fuimos creando así un equipo con psicólogos de los distintos terrenos que pudieran abarcar las problemáticas planteadas. Entretanto fuimos desarrollando lo que se conoce como ‘Programas de Apoyo al Empleado‘. En este caso la empresa paga por un beneficio para el empleado que puede ponerse en contacto con un psicólogo o un coach para ayudarle a mejorar su bienestar emocional. Estos programas surgieron ya a finales de los años 90 y te diría que ahora es nuestro negocio principal: el dar apoyo emocional a los empleados.
MVyC: A ver si te he entendido bien. ¿Esto significa que hay un grupo de profesionales a disposición de los empleados segun los necesiten?
MC: Efectivamente. Como sabes, actualmente muchas empresas tienen empleados en toda España. Nuestros psicólogos están en Madrid y Barcelona. El tratamiento se realiza vía video-llamada a cualquier empleado de cualquier empresa y en cualquier lugar. El empleado tiene un número de teléfono, también una app, webinars y una web con muchísimo contenido que puede consultar cuando quiera. Es un sistema completamente confidencial y sólo para el empleado. La empresa lo costea pero no recibe ninguna información acerca del uso que el empleado hace. Es igual que si la empresa te pagara un seguro médico. Este programa, a raíz de la pandemia, empezó a coger un auge importante. Es cuando las empresas comprendieron que de alguna manera también debían ocuparse de la salud mental de sus empleados. Esto ha significado un gran ‘punto y aparte’. Antes de la pandemia la salud mental no era un tema que estuviera presente en las compañías. Ahora sí y esta es nuestra oportunidad. Nuestro programa se llama ‘BH Bienestar‘ y ahora mismo estamos ofreciendo ayuda a más de 90.000 empleados de diferentes empresas. Desde grandes compañías con 15.000 empleados a pequeñas con menos de 50, es decir, es un tema que depende más de la mentalidad del empresario que del tamaño de la empresa.
MVyC: Así que después de la pandemia ¿esta parte de vuestros servicios es la que más se ha incrementado?
MC: Totalmente. Antes de la pandemia nosotros teníamos unas dos empresas nuevas al año. Y en poco tiempo, durante el confinamiento, duplicamos el número de empresas a las que ofrecíamos nuestos servicios. Los teléfonos no dejaban de sonar. Creo que se ha hecho una transición. Antes la salud mental ni se quería nombrar en las empresas. Fíjate que hasta a los cursos para gestionar el stress muchas veces teníamos que cambiarles el nombre. Con la pandemia la salud mental ‘sale a flote’, no sólo en las empresas, sino tambien a nivel público. Ha significado un antes y un después. Estamos en una fase en que no es un ‘boom’ pero sí un cambio de mentalidad. Igual que la empresa se preocupa por la salud física del empleado, se está empezando a preocupar por su salud mental. Pasamos muchas horas trabajando y cualquier problema, tanto físico como mental, tiene impacto en la actividad empresarial. Al mismo tiempo la empresa tiene una responsablidad de cara al empleado. Yo creo que esta nueva mentalidad ha venido para quedarse.
MVyC: ¿Qué problemas ha traído la pandemia consigo?
MC: En el momento del confinamiento se vivieron situaciones dramáticas, había muchos miedos, aparecieron problemas psicológicos que estaban ocultos y que estas situaciones de stress hacen aflorar. Claro que todo esto nos hizo aprender muchísimo. Gracias a nuestro programa de apoyo y la colaboración de una farmacéutica española pudimos dar apoyo psicológico gratuito a los médicos que estaban en primera fila de esta batalla. Hubo situaciones muy complejas. Por parte de las empresas, al hablar directamente con los empleados, hemos podido vivir de primera mano sus experiencias. Ahora mismo ha quedado una sensación de indefensión. Creo que son más los jóvenes a los que les ha quedado una secuela porque han tenido que vivir una adolescencia complicada debido a cómo han sido sus relaciones con los demás. Los adultos tenemos relaciones más sostenidas en el tiempo. El tránsito de la escuela a la universidad no lo han hecho correctamente.
MVyC: ¿Pero seguis también con vuestros programas originales ?
MC: Si, claro, pero ahora nuestro punto fuerte ha pasado a ser este, aunque seguimos haciendo formación y coaching. Desde nuestros dos centros en Barcelona y Madrid ofrecemos nuestros servicios tanto a empresas en España como en Portugal.
De todas formas seguimos desarrollando el programa de ‘Apoyo al empleado‘ persiguiendo siempre una calidad máxima y con muchas funcionalidades para llegar a absolutamente todos los empleados. Hay un error en muchos de estos programas. No hay que llegar sólo al empleado que ‘está mal’ sin a todos los empleados de la empresa. Ese es nuestro objetivo.
MVyC: Todas las personas que trabajan para vosotros son psicólogos….
MC: Absolutamente todos. Es nuestra insignia. Algunos de ellos son además coach. Siempre tuvimos claro que este debía ser nuestro punto fuerte. Con la entrada del coaching este aspecto profesional se diluyó un poco, pero parece que esa ola del coaching está pasando aunque nosotros sí que apostamos por un coaching profesional y de valor.
MVyC: Parece que lo lógico es que las personas que den estos cursos sean psicólogos, ¿hay mucho intrusismo?
MC: Muchísimo. Nuestra batalla en este aspecto es ofrecer mucha calidad asistencial y con la profesionalidad ante todo. Somos el primer programa de ayuda al empleado español y el primero que está creado por psicologos clínicos. A raíz de la pandemia se han multiplicado las propuestas de este tipo de cursos y fundamentalmente por empresa de ‘Prevención de Riesgos’ que nada tienen que ver con la psicología clínica. Son expertos en riesgos, pero no en psicología. Aparte que también hay que luchar contra empresas que ofrecen este tipo de cursos a precios muy baratos. Nosotros preferimos mantener la calidad. Menos mal que cada vez se presta más atención a la profesionalidad y no al precio.
Está claro que empresas como la de Miquel Casas se hacen cada vez más necesarias en este complicado mundo en el que vivimos, sobre todo para dar sentido a nuestras vidas. Desde aquí le queremos dar las gracias por ello.
Para más información: www.bhconsulting.es