Estado de alarma: Día 70

Buenas tardes. ¿Cómo llevamos el sábado? ¿Ya habéis salido a dar una vuelta? Yo a por tabaco, nada más.
Me acordé de una anecdota muy graciosa que me pasó en los tiempos de televisión: un día íbamos Paco Racionero y yo del brazo dando vueltas por los pasillos, seguramente esperando a que empezara la grabación. Nos cruzamos con José María Guillén, un actor muy popular en esa época. Empezaron a hablar los dos y, no sé por qué, se mencionó a ‘una alemana’ y Guillén dijo: ‘¿Alemana? Puta seguro.’ Mira, de verdad que no pude contenerme. Me dió tal ataque de risa. Es que pocas veces he oído una metedura de pata tan grande. Cuando Paco le dijo que yo era alemana, Guillén no hacía más que venir detrás de nosotros disculpándose. Se puso de todos los colores. La verdad es que no me sentí ofendida. Era el típico comentario espontáneo que tampoco iba con maldad. Pero la metedura fue sonada. Cosas que pasan cuando hablamos sin pensar.
¿Os habéis fijado en la cantidad de pájaros que hay ahora? Es increíble. Por casa hay ratos que empiezan todos a volar como locos en vuelo rasante. Parece que se están persiguiendo y te extraña que no choquen. En una de las habitaciones, y por segundo año, han anidado en el hueco de la persiana. Tenemos folclore que no veas. Se deben haber creído que esto es un b&b. Igual incluso lo han subarrendado. El año pasado, una vez que se fueron, quitamos el nido. Pero se ve que se ha corrido la voz. Esto mal arreglo tiene.
En la Playa de San Juan, en el tendedero que estaba abierto, teníamos el calentador y un año al llegar habían hecho un nido dentro. Le tuvimos que poner una especie de armario con rejas para evitar que volvieran a hacerlo. Igual un día de estos tengo un aguila mirándome desde el poyete de la ventana.
En Alemania entró un día una paloma en el dormitorio. Monté un escándalo que para qué. Ni que hubiera entrado un dragón. Y eso que todavía no había visto ‘Los pájaros’.
Ayer hizo una receta nueva y ha salido muy buena: pochas cebolla y añades pimientos, calabacín, tomate, zanahoria; todo en trozos; pones pimentón, caldo de verdura y luego añades judías blancas. Tenía un bote de judías (suelo tener por si las moscas) y ha quedado muy rico. Por si queréis probar.
Música para el sábado: una del pasado, muy pasado, otra del pasado, menos pasado y esta del pasado reciente.

¡Hasta mañana!

 

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