‘Sorolla y Benlliure: una amistad, dos artistas’ en el Museo Sorolla

Hasta el 2 de octubre 2022 el Museo Sorolla rinde un pequeño homenaje a Mariano Benlliure en el 75 aniversario de su fallecimiento.Benlliure y Sorolla fueron amigos durante toda su vida como podemos constatar en sus cartas, sus dibujos y los regalos que se hicieron. Así en esta muestra podemos ver 8 esculturas que Benlliure regaló a Sorolla, 3 dibujos y 1 cerámica.

Ana Muñoz Martín y Covadonga Pitarch, comisarias de la exposición; ©Lola Diehl

Este año se han programado diversas actividades por parte de la Fundación Mariano Benlliure, desde conferencias hasta visitas a los monumentos del escultor en Madrid.

La exposición ha sido comisariada por Ana Muñoz Martín y Covadonga Pitarch.

La amistad entre ambos artista comenzó en Valencia, ciudad natal de ambos. Ambos consiguieron la medalla de oro de la Exposición Universal de París de 1900 y viajaron por diversos países cosechando grandes éxitos. Ambos fueron ‘profetas’ en su tierra, Sorolla como pintor de éxito y Benlliure como escultor, 13 de cuyas obras podemos ver por todo Madrid, como la estatua ecuestre de Alfonso XII en el Retiro, los panteones de Sagasta, Cánovas y Dato en el Panteón de Hombre Ilustres, el monumento al General Martínez Campos y tantas más.

‘El gaitero’ fue una de las primeras obras de Benlliure.

‘El gaitero’, 1884 ©Museo Sorolla

Entre las esculturas de esta pequeña muestra destaca el yeso ‘Estudio para el monumento a Velázquez’ que se expone por primera vez.

‘Estudio para el monumento a Velázquez’, 1899; ©Lola Diehl

Además podemos ver el busto de Antonio García Peris, afamado fotógrafo y suegro de Sorolla, de María Sorolla García, hija del pintor y que Benlliure le regaló con motivo de su boda y  también un jarrón decorativo.

Antonio García Peris; ©Lola Diehl
Jarrón decorativo, 1919; ©Lola Diehl
María Sorolla Garcia, 1919; ©Museo Sorolla

 

Mariano-Benlliure-Gil-ca.-1904.-Joan-Vilatoba.-Archivo-Fundacion-Mariano-Benlliure; ©Museo Sorolla
Fotografía de Sorolla y Benlliure; ©Lola Diehl

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