El nombre real de esta plaza es plaza de Cánovas del Castillo, aunque casi nadie la llama así, ya que la fuente se ha adueñado del nombre.
Alrededor de esta zona hay magníficos edificios, como el Museo Thyssen-Bornemizsa, el Prado y los hoteles Ritz y Palace.
La zona entre Neptuno y Cibeles estaba dedicada al esparcimiento y la que se encuentra entre Neptuno y Atocha al conocimiento. La idea era que hubiera museos, institutos, bibliotecas, idea que se ha realizado parcialmente.
Al igual que la Cibeles reune a los aficionados al Real Madrid, Neptuno es lugar de encuentro para los hinchas del Atlético de Madrid.
Una zona de esparcimiento y cultura
Fue el rey Carlos III quien decidió darle a Madrid un aspecto más moderno. Especialmente la zona alrededor del Paseo del Prado y Recoletos fue remodelada. Debía ser un lugar de cultura con museos y también de esparcimiento, donde los madrileños pudieran disfrutar de un agradable paseo.
La fuente de Neptuno se encuentra en la Plaza de Cánovas del Castillo. Cuando fue construída se colocó, en primer lugar, mirando en dirección a la Cibeles. Se encontraba, al igual que esta otra fuente, a ras del suelo.
La fuente fue diseñada por Ventura Rodríguez.
Símbolos en la fuente
Neptuno está situado sobre un carruaje hecho de una concha tirado por dos caballos de mar. El dios lleva un tridente en su mano izquierda y una serpiente de mar enroscada en la derecha. También podemos ver algunos delfines nadando alrededor del carruaje.
La fuente se comenzó en 1777 y está hecha de mármol de Montesclaros (Toledo). Juan Pascual de Mena estuvo a cargo de las esculturas, aunque no pudo terminar el proyecto, ya que murió antes. Se cree que tanto la figura de Neptuno como los caballos de mar son obra de su discípilo José Arias.
El carruaje y los delfines fueron realizados por varios escultores y la fuente se terminó finalmente en 1786.
Neptuno es un dios romano similar al dios griego Poseidón. Es el dios del mar y todo tipo de agua. Su mujer era Anfítrite. Vivían con sus hijos en un palacio de oro debajo del mar. Neptuno solía clavar su tridente en las piedras para que brotara el agua. Tenía poder sobre las tempestades y todos los dioses marinos estaban bajo su mando.
Se creía que el ruido producido por los terremotos venía del carruaje de Neptuno.
Los delfines representan la salvación. Según una leyenda, eran considerados los amigos del hombre y el animal más rápido. Cuando aparece un delfín enroscado a un ancla representa la prudencia.
Podemos ver muchas imagenes de Neptuno tanto en pinturas como esculturas. Fue una imagen muy representada en el Renacimiento y Barroco.
Fotografías: Rafael Castañeda